Se incorporan aulas prefabricadas, pero aún hay quejas por la falta de profesores y recursos
La Comunidad de Madrid se ha comprometido a instalar 135 aulas prefabricadas en diversos colegios e institutos públicos. Para ello, se ha aprobado en el Consejo de Gobierno de esta semana destinar una partida de más de 13,3 millones de euros. Estos módulos, que se aumentarán con otros 55 próximamente, son necesarios para cumplir con las ratios precisas ante la pandemia por Covid-19.
Esta medida forma parte del plan elaborado conjuntamente por las consejerías de Sanidad y de Educación y Juventud. La finalidad era que los niños pudieran volver a las aulas en las mejores condiciones de seguridad ante la situación por el coronavirus. Cuando se sumen las otras 55 aulas, la inversión alcanzada será de 16 millones de euros.
Aulas prefabricadas para reducir ratios a 20 alumnos en Infantil y Primaria, y 23 en Secundaria
La compra de estas aulas prefabricadas para colegios e institutos públicos se ha realizado por procedimiento de emergencia. Ya se están instalando en los centros que necesitaban generar espacios adicionales para reducir las ratios a 20 alumnos, en el caso de Educación Infantil y Primaria, y a 23, en Secundaria.
Se trata de aulas modulares prefabricadas que permiten que los grupos de convivencia no tengan contacto entre sí, algo necesario para prevenir los contagios entre alumnos. Estas disponen de salida directa a los patios de los centros, ventilación natural y aislamiento térmico y acústico. También, pueden incorporar un aseo adosado, cuando es necesario.
Estas construcciones modulares tienen la misma vida útil que las convencionales, según confirman desde la Comunidad de Madrid. Se instalan de una forma rápida y limpia, pueden adaptarse a las necesidades de los centros según las circunstancias, y cumplen con todos los estándares técnicos.
Más medidas para mantener la distancia de seguridad
A estas aulas prefabricadas se suman los 44 espacios adicionales que se han habilitado para institutos y colegios públicos, gracias a la colaboración del Gobierno regional con los ayuntamientos de la región. Se han dispuesto en centros culturales y cívicos, bibliotecas, pabellones deportivos, y otras instalaciones de las localidades de Madrid.
Se ha optado por esta solución en Anchuelo, Arganda del Rey, San Fernando de Henares y RivasVaciamadrid. También ha llegado hasta Valdilecha, Villalbilla, El Molar, Soto del Real, Pedrezuela, Lozoya, Collado Villalba, Valdemorillo, Pozuelo de Alarcón, Aranjuez, Arroyomolinos, Chapinería y Cubas de la Sagra. Otras localidades que han elegido esta opción son Fuenlabrada, Getafe, Móstoles, Parla, Pinto, Valdemoro, Alcorcón, Aranjuez, Arroyomolinos, Leganés y Navalcarnero.
Además, se han adquirido e instalado 2.000 mamparas en los colegios e institutos públicos que lo han solicitado. Son individuales (una por pupitre) con medidas de 60 por 60 centímetros. Esto garantiza la protección del alumno frente a sus compañeros.
Son de fácil instalación y se han ubicado en aquellas clases de centros educativos en los que no hay espacios alternativos. También se han desplegado 20.000 mamparas de comedor.
Quejas por la falta de profesores y recursos
Sin embargo, en la otra cara de la moneda de este primer curso bajo la amenaza del coronavirus, se encuentran las quejas de sindicatos como Comisiones Obreras. Han denunciado que aún faltan 537 profesores de los 7.398 anunciados para una vuelta a las clases segura. Por ello, añadir aulas prefabricadas o mamparas pierde su efectividad si no hay maestros para impartir clases.
La secretaria general de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín advierte de que las sustituciones «no se están haciendo con agilidad» y no se cubren las bajas, los permisos o las jubilaciones «con prontitud«.
Según los datos de la organización, hasta el momento se han añadido 5.987 cupos de plantilla docente, de los 6.281 prometidos por el gobierno de la región para reducir ratios y así aumentar grupos. También se han incorporado 873,5 nuevos cupos a las plantillas de los centros de los 1.117 comprometidos para refuerzos educativos.
Galvín insiste en que en todos los centros públicos, en este momento, «hay alumnado que no tiene profesor» debido a todas estas circunstancias. A esta precaria situación en la educación pública se añaden las quejas por las clases semipresenciales en 3º, 4º de ESO y Bachillerato a las aulas. Falta de cámaras, ausencia de clases, desorganización y, en algunos casos también, retraso en la entrega de los libros del programa Accede son algunas de las protestas en este sentido.
Si te ha gustado este artículo, déjanos un comentario. También puedes regalarnos tu Me gusta en nuestro Facebook y seguirnos en Twitter.
Si te ha gustado este artículo, déjanos un comentario. También puedes regalarnos tu Me gusta en nuestro Facebook y seguirnos en Twitter.
