Todos los sábados y domingos de los próximos meses, se puede acceder a visitas guiadas gratuitas, sin inscripción previa, y desde junio, a talleres para niños, con reserva de plaza a partir de mañana, miércoles
Más de 100 años después de su cierre, el frontón Beti Jai (calle del Marqués de Riscal, 7) volvió a abrir sus puertas en junio de 2019 y empezó a ofrecer visitas gratuitas temporales, hasta el pasado mes de marzo, cuando reabrió con carácter permanente para acceso libre los fines de semana, coincidiendo con la Semana Santa y con su 130º aniversario. Desde el 25 de mayo, se ofrecen, además, visitas guiadas gratuitas sábados y domingos y talleres.
Se programan para cada media hora, en horario de 10 a 14 h y de 16 a 20 h, hasta completar aforo (salvo a las 13:30 horas y a las 19:30 h, puesto que la duración total es de 50 minutos). Se puede participar en ellas sin necesidad de inscripción previa.
El objetivo del Ayuntamiento de Madrid es que los madrileños y visitantes puedan conocer de cerca este edificio, uno de los más emblemáticos de la capital y que fue declarado Monumento Nacional en 1991 y Bien de Interés Cultural en 2011.
Talleres para público familiar
Asimismo, desde el 8 de junio se desarrollan los talleres para público familiar ‘Tejiendo Beti Jai. Las ciudades decoradas’. Se ofrecen 3.600 plazas, que se pueden reservar a partir de las 10 h del miércoles 29 de mayo, a través de la web.
Esta actividad dirigida a público familiar (niños de 7 a 12 años acompañados de adultos) pretende acercar, a través de una propuesta artística, los fundamentos arquitectónicos y ornamentales de la arquitectura neomudéjar madrileña, de la que Beti Jai es uno de sus exponentes.
La iniciativa consiste en realizar un trabajo manual conectando el arte de tejer con las bases de la ornamentación arquitectónica. Se celebrará los sábados y domingos de junio, julio y septiembre, así como los días 31 de agosto, 5, 6, 12 y 13 de octubre.
La reforma del Beti Jai
El nuevo Beti Jai, que costó casi 5 millones de euros, se ubica en Chamberí. Tiene una cancha de 67 metros de largo, 20 metros de ancho y 11 metros de alto. Además, está rodeada por gradas que forman una planta semi-elíptica.
Las labores de restauración se realizaron tras un laborioso trabajo de investigación. La prioridad de los restauradores fue que el frontón fuese lo más similar posible al Beti Jai original.
Próximamente se abrirá al público el centro de interpretación en este inmueble, que narrará la historia y devenir del inmueble, desde sus inicios como espacio deportivo, pasando por sus diferentes usos, su deterioro y abandono, así como la recuperación del edificio. El objetivo es darlo a conocer y garantizar a los visitantes una adecuada experiencia patrimonial.
En lo que va de año, más de 23.500 personas han visitado Beti Jai. Ha acogido también el programa ‘Descubre Beti Jai’, en el que han participado hasta la fecha 7.296 personas, tanto en visitas guiadas como en itinerarios interactivos para familias.
El frontón Beti Jai cumple 130 años
El frontón Beti Jai, obra del arquitecto Joaquín de Rucoba y Octavio de Toledo y a instancias del promotor donostiarra José Arana, fue inaugurado en 1894, cuando el juego de pelota vasca estaba en su máximo apogeo. El 29 de mayo se cumplen 130 años del primer partido, lo que la convierte en la instalación deportiva más antigua de Europa.
Es el único que se conserva de los 30 frontones que llegó a albergar Madrid a principios del siglo XX. Tan solo unos años después de su inauguración, el frontón comenzó a acoger otras actividades como conciertos y eventos sociales. Una de las funciones más importantes que tuvo fue la de Centro de Ensayos de Aeronáutica, dirigido por Leonardo Torres Quevedo, inventor del mando a distancia.
El Beti Jai cerró sus puertas en 1918. Desde entonces, ha sido utilizado como taller mecánico, concesionario de motos Harley Davidson, comisaría de policía, cárcel, e, incluso, como improvisada corrala con varias familias habitando las gradas.
En 2015, el Ayuntamiento de Madrid adquirió la propiedad del Beti Jai y comenzó los trámites para su rehabilitación. Las obras de restauración acabaron en enero de 2019.
Para conseguir ser leal al Beti Jai original, los restauradores recurrieron a periódicos, fondos de bibliotecas, asociaciones y expertos. El frontón cuenta con diferentes estilos arquitectónicos, como el eclecticismo de la fachada principal, el estilo neomudéjar del interior y la arquitectura de hierro propia del siglo XIX.
La restauración y reapertura del Beti Jai fue posible gracias a la plataforma ciudadana ‘Salvemos el Beti-Jai de Madrid’. Ante el abandono del monumento por parte de su propietario particular, este grupo llevaba años reclamando que el Ayuntamiento se hiciese cargo del frontón. Su objetivo era conseguir la rehabilitación de un Beti Jai que se convirtiese en espacio para usos deportivos y que fuese de uso público.