La ‘playa’ de Madrid Río y sus chorros refrescantes, por un lado, y las pérgolas nebulizadoras en el parque de La Gavia y plaza de España, por otro, en funcionamiento de 11 a 21 horas
Por todos es sabido que el verano en Madrid llega a ser asfixiante con sus altas temperaturas, pero hay varios espacios donde podrás refrescarte y, además, disfrutar de un agradable entorno en estos meses de calor. Así, por un lado, tenemos la emblemática ‘playa’ urbana de Madrid Río con sus chorros de agua, y por otro, las pérgolas nebulizadoras, estratégicamente ubicadas en los parques de La Gavia y de plaza de España, en funcionamiento desde las 11 h hasta las 21 h durante toda la temporada estival.
Madrid Río puso en marcha en mayo los refrescantes chorros de su ‘playa’ urbana, que alivian a los madrileños y visitantes de las altas temperaturas en este reclamado e icónico lugar. «Hay pocas cosas más agradables en la capital que poder venir a Madrid Río a disfrutar de estas zonas estanciales«, aseguró entonces el alcalde José Luis Martínez-Almeida en una visita al lugar. Además, animó a darse un «remojón cuando el calor empieza a apretar«.
Estas singulares instalaciones representan un paso significativo de la capital en la creación de espacios públicos que priorizan el confort y la calidad de vida de los madrileños. El funcionamiento de este sistema se realiza a través de un depósito en el que recircula el agua y cuenta, asimismo, con una depuradora, para que el agua tenga las condiciones de salubridad e higiene adecuadas.
Con estas instalaciones no solo se busca proporcionar alivio inmediato frente el calor, sino también fomentar un entorno propicio para que los ciudadanos puedan disfrutar de la capital de manera cómoda y segura, mostrando el compromiso de la ciudad con la adaptación a condiciones climáticas más extremas.
La ‘playa’ de Madrid, un espacio para combatir el calor
Ubicada en el parque de Arganzuela, esta popular ‘playa’ nace como resultado del concurso de ideas infantil y juvenil celebrado en el año 2005, en el que participaron 3.525 escolares de toda la ciudad. Cuenta con tres recintos acuáticos de forma ovalada. Los visitantes pueden disfrutar de una variedad de efectos de agua, incluyendo láminas superficiales para relajarse, 72 chorros de agua de diferentes alturas y nubes de agua pulverizada a través de 315 pulverizadores que refrescan el ambiente.
Madrid Río, que forma parte de la ampliación del parque de Arganzuela, es uno de los grandes pulmones verdes del centro de la ciudad y cuenta con 232.000 metros cuadrados . Las zonas de descanso, que abarcan más de 6.500 metros cuadrados, están sombreadas por cerca de 300 árboles, proporcionando un entorno ideal para disfrutar de los días de calor de manera segura y cómoda.
Frente al calor de madrid, pérgolas nebulizadoras en el parque de la Gavia y en plaza de España
El parque de La Gavia se une a la lucha contra las altas temperatura activando su innovadora pérgola nebulizadora de agua, que complementa la urbanización del parque y proporciona un ambiente fresco y agradable.
Ubicada en el Bosque de los Sentidos, cerca de la entrada principal del recinto, esta estructura cuenta con un avanzado sistema de climatización que pulveriza agua, creando una niebla fina y que cubre una superficie de 200 metros cuadrados. Este sistema ayuda a reducir la temperatura ambiente, ofreciendo un refugio refrescante para los visitantes.
La pérgola, rodeada de jardines y adornada por rosales trepadores, está equipada con su propio sistema de riego, incluye, además, diez bancos que invitan al descanso y la socialización. Su ubicación estratégica permite a los usuarios disfrutar de vistas a los espacios ajardinados y vigilar las zonas infantiles cercanas.
Como medida adicional para combatir el calor, están en funcionamiento los nebulizadores que complementan la instalación de los juegos infantiles en plaza de España.
Se trata de unas estructuras en forma de sombrilla dotadas de este sistema que consigue un efecto de enfriamiento del ambiente gracias a la pulverización del agua en gotas muy finas que, en contacto con el aire, se evaporan rápidamente, absorbiendo el calor ambiental y reduciendo la temperatura.