La asociación de vecinos lleva seis años demandando soluciones al Ayuntamiento
El Grupo Especial de Operaciones (GEO) halló en la madrugada del lunes el cadáver del joven de 21 años, de origen ecuatoriano pero de nacionalidad italiana, que había desaparecido el domingo en las lagunas de Ambroz. Esta zona de agua se encuentra en un polígono cerca de Vicálvaro, entre la M-40 y la Radial 3 y pertenece al distrito de San Blas-Canillejas.
Búsqueda y rescate del cuerpo
La búsqueda comenzó a las 18:00 de la tarde cuando Emergencias recibió la llamada de los amigos del chico explicando que había desaparecido al introducirse en el agua sobre las tres de la tarde. En primer lugar acudió el equipo subacuático de bomberos del Ayuntamiento de Madrid, que rastrearon en la superficie pero no apareció.
Más tarde se personaron los buzos de la Policía Nacional quienes tras dos horas de búsqueda encontraron el cuerpo, veinte minutos después de las medianoche. Samur Protección Civil confirmó el fallecimiento del joven, mientras que un psicólogo atendió a la familia que se había presentado en el lugar. La Jefatura Superior de Policía considera que se trata de una muerte accidental.
Esta madrugada el GEO ha recuperado el cuerpo sin vida del joven de 21 años, de origen ecuatoriano y nacionalidad italiana, desaparecido ayer en una laguna de Vicálvaro (#Madrid). Investigamos el suceso. Todo apunta en un primer momento a muerte accidental. #EstamosPorTi pic.twitter.com/EQyY0Q8n6a
— Policía Nacional (@policia) September 17, 2018
Las lagunas de Ambroz
No es el primer incidente que ocurre en estos pequeños embalses. Hace seis años ya falleció un niño de 8 años en el mismo lugar. A raíz de este grave accidente, la Asociación de Vecinos Las Musas-Las Rosas demandó al Ayuntamiento una solución frente al peligro que suponen las lagunas. «Solo se instaló un vallado que no ha dado ninguna protección», se queja el presidente de la Asociación, Pablo Morena.
Los representantes de los vecinos protestan porque las lagunas acumulan mucha suciedad con el consiguiente riesgo para quien se acerque por allí: «están llenas de insectos, la gente arroja escombros, es una zona industrial donde se amontona cemento y otros desechos y eso junto con las lluvias y el agua del alcantarillado de la M-40, que va desde la calle Sofía en Las Rosas, todo va a parar a la laguna».
Morena explica además que «por ese motivo, el espacio se convierte en una zona de agua estancada con muy mal olor y mucha basura». Todas estas circunstancias han provocado que «se haya creado un desnivel en la tierra que puede provocar en cualquier momento un hundimiento».
El riesgo de que cualquier persona que pase por allí sufra un accidente es cada día mayor, asegura: «la alerta es ya muy grave y estamos seguros de que no dejará de morir gente si esto no se arregla».
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