El 13 de abril, el Ayuntamiento de Madrid reparte sus fragmentos entre los interesados, bajo reserva previa
Las obras de ampliación de la Línea 11 de Metro de Madrid obligaron a desmontar, hace unos meses, el monumento conmemorativo del 11M que se ubicaba en el exterior de la estación de Atocha, para construir otro en su interior. Ahora, las piezas de esta antigua construcción se van a repartir entre todos los ciudadanos que deseen conservar una. El viernes 5 de abril a partir de las 12 comienza el proceso de reserva previa.
El reparto se realiza el sábado 13 de abril, de 9:30 a 20 h, en la Galería de Cristal del Palacio de Cibeles (calle de Montalbán, 1). Los interesados en hacerse con una pieza deben realizar una reserva previamente a través de la web oficial de Patrimonio y Paisaje del Consistorio. Se recomienda realizar la preinscripción para garantizarse una de estas piezas, finalizando el plazo el 12 abril a las 13 h.
Al tratarse de ladrillos de vidrio, con un peso aproximado de 8,5 kilogramos y un tamaño de 30x20x7 cada uno, se recomienda a los ciudadanos que acudan a buscar uno de ellos, llevar una maleta o una mochila con ruedas para poder transportarlos.
«Hemos pensado que es una buena forma de continuar recordando y honrando a las víctimas y de preservar la memoria de lo ocurrido«. Así lo oexplicó hace unos días la delegada de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, Marta Rivera de la Cruz. La iniciativa se comunicó a las asociaciones de víctimas con el fin de que dieran su visto bueno, como así ha sido.
Más de 15 años del monumento conmemorativo del 11M
El monumento conmemorativo del 11M del que ahora se repartirán sus piezas entre los interesados, se instauró en 2007 como símbolo de recuerdo a las víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004. Se ubicó en el exterior de la estación de Atocha, lugar en que tuvieron lugar los terribles sucesos. La construcción tenía forma de cilindro y en su interior se encontraban inscritos los nombres de las víctimas y algunas frases en su memoria.
Allí ha permanecido durante 16 años hasta que en 2023 ha tenido que desmontarse para los trabajos de ampliación de la Línea 11 de Metro, que atravesará la ciudad. La acción se ha realizado de acuerdo con las asociaciones de víctimas, según han confirmado en todo momento desde el Consistorio.
En su lugar, se ha creado un nuevo monumento conmemorativo. Está ubicado justo debajo de donde se encontraba el anterior, en la misma estación de Atocha. Se inauguró el pasado 11 de marzo coincidiendo con el 20 aniversario de los atentados. Durante dos días, proyectó un haz de luz azul hacia el cielo en memoria de todos los afectados por el suceso.
Se trata de un lugar de unos 2.000 metros cuadrados, cuatro veces más grande que el antiguo, con paredes azul cobalto. En ellas, se encuentran grabados los nombres de las víctimas mortales y algunas de las frases que se podían leer en el monumento anterior. Además, dispone de 193 puntos de iluminación en el techo que representan a cada una de las personas que perdieron la vida en el atentado.
