- Más de 300.000 personas de toda España, según la organización, acudieron a la «Marcha del cambio», convocada por Podemos.
- Recorrieron el centro, desde la Plaza de Cibeles a la Puerta del Sol, con banderas griegas y republicanas.
- El lema «El momento es ahora» congregó a madrileños y ciudadanos que llegaron en uno de los 260 autobuses fletados por el partido o en coches compartidos.
El cambio iniciado por Grecia, que en las pasadas elecciones del 25 de enero dio la victoria al partido que aglutinaba el descontento de la sociedad, ha insuflado aire a otros miles de descontentos en otros países. Es el caso de España, donde el camino iniciado por los griegos hacia la ruptura y la renovación, unido a la mecha encendida desde hace un tiempo contra los partidos políticos tradicionales, la situación económica y el hastío, ha lanzado a la calle hoy a cientos de miles de personas, en una multitudinaria manifestación convocada por Podemos.
Alrededor de 300.000 personas, segun la organización, inundaron la Plaza de Cibeles, la calle Alcalá y la Puerta del Sol, en una marea humana atraída por la llamada «Marcha del cambio», convocada por el partido político que desde hace meses está revulsionando a la sociedad española. Pocas razones motivan una movilización masiva en nuestro país, pero en esta ocasión ciudadanos de todos los puntos de España han tenido suficientes motivos para montarse en uno de los 260 autobuses fletados por las asociaciones locales del partido, ponerse al volante de su propio vehículo o compartir plaza en otros, y acudir a la llamada en la capital.
La Puerta del Sol, cuna del movimiento 15M
A las 12 de la mañana estaban citados los manifestantes en la Plaza de Cibeles, desde donde partían por la calle Alcalá hasta la Puerta del Sol, punto neurálgico del movimiento 15M, cuna de muchos de estos descontentos. Un importante dispositivo policial estaba preparado ante posibles incidentes, pues era ya previsible una importante asistencia a la convocatoria, que finalmente se cumplió con creces.
Pocos minutos antes del inicio de la «Marcha del cambio», el responsable de la Secretaría Política de Podemos, Íñigo Errejón, calificaba el multitudinario encuentro de «movilización histórica y un hito en la democracia de nuestro país; los cientos de miles de ciudadanos que hoy han acudido a Madrid no venían ni a protestar ni a pedir nada, sino a celebrar que el cambio es posible, a construir soberanía popular».
«El año del cambio»
El número dos de Podemos aseguró que los asisentes procedían «de opciones políticas muy distintas, que hoy han compartido el espíritu de ilusión que ha desbordado las calles de la capital». Más tarde, el líder de la formación, Pablo Iglesias, que se unió a la marcha a mitad de camino, sentenció «es el año del cambio, podemos soñar y podemos vencer».
Los cientos de miles de ciudadanos de toda España que acudieron a la marcha se movieron bajo el lema «el momento es ahora», enarbolando banderas republicanas y griegas, entre otras, y alzando pancartas con frases como «Quisieron enterrarnos pero no sabían que éramos semilla», «España capital Berlín» o «y una luz esplendente asoma a nuestra vida». Muchos de los asistentes pudieron estar en la concentración gracias a un despliegue de medios aportados voluntariamente entre los propios ciudadanos, que pusieron coches compartidos a disposición de quien pudiera necesitar una plaza y alojamientos para ofrecer un lugar donde domir a los que viajaban desde otros puntos de España.
