Piscinas naturales, antiguas calzadas romanas, miradores y cascadas se encuentran a lo largo de la ruta
El Valle de la Fuenfría, en Cercedilla, cubierto de pino silvestre, es uno de los lugares más emblemáticos y admirados de la región, por eso merece hacer una ruta para llegar a él. Son muchos los recorridos señalizados para recorrer el valle. Hoy proponemos el que comienza en el Centro de Educación Ambiental Valle de la Fuenfría.
Se trata de un paseo que discurre por varios puntos a lo largo de sus 6,600 km: dos áreas recreativas, unas piscinas naturales, una antigua calzada romana -con puentes de la época y que coincide con el Camino de Santiago madrileño-, una pista forestal que lleva a la Ducha de los Alemanes, los Miradores de los Poetas y el Reloj de Camilo José Cela. Otra opción es comenzar el recorrido en el Punto 4 y evitar los primeros 1,600 km.
Cómo llegar a Las Dehesas
- En coche: tomar la A-6 hasta el km 47, luego la M-614 hacia Guadarrama. En el pueblo, hay que girar a la izquierda en la calle Alfonso Serna, y continuar por la N-VI, dirección A Coruña. Un kilómetro más tarde, se toma la M-622 hacia Los Molinos-Cercedilla. En este punto, se coge la M-966, que llega a Las Dehesas. Puedes consultar la ruta aquí.
Ficha técnica de la ruta al Valle de la Fuenfría
- Tipo de itinerario: lineal
- Distancia aproximada: 6,600 km (ida)
- Duración aproximada: 2 h
- Señalización: parcialmente señalizada
- Dificultad: fácil
- Desnivel: 350 m
- Época aconsejada: evitar los días calurosos, fríos o con nieve.
Ruta por el Valle de la Fuenfría
Desde el Centro de Educación Ambiental Valle de la Fuenfría, se siguen las indicaciones hacia el Albergue Juvenil Las Dehesas y la calzada romana. Pasaremos por el Área Recreativa Las Dehesas, tras la segunda bifurcación, seguiremos de frente.
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Podemos desviarnos por un camino a la derecha para ir al parque de Las Berceas, otra gran zona recreativa, con piscinas naturales para el verano, y posibilidad de practicar tirolina, escalada, etc. Retomando la ruta, caminaremos 290 m más y avanzaremos por una pista de tierra. Si se ha optado por comenzar desde este punto el paseo, el vehículo deberá estacionarse en la zona habilitada.
Encontraremos dos barreras y llegaremos al Puente del Descalzo, donde caminaremos sobre una antigua calzada que, en el siglo I, trazaron los romanos para unir Segovia con Titulcia. Es un camino empedrado con un ancho variable y con una construcción muy cuidadosamente ejecutada.
Además del Puente del Descalzo, hay en pie otros tres puentes romanos levantados en el mismo siglo para salvar el arroyo de la Venta: el del Molino o del Reajo, el de La Venta y el de Enmedio. La calzada romana lleva a una pradera, que atravesaremos para alcanzar la carretera de la República, donde hay que girar a la derecha. Se trata de una pista forestal que comenzó a construirse en 1931, durante la Segunda República.
La Ducha de los Alemanes
Tras girar a la derecha, nos encontramos con una barrera, que pasaremos para llegar, 700 metros más adelante, al arroyo de la Navazuela. Lo cruzaremos y, justo después, aunque la ruta continúa por la pista principal, se recomienda tomar el desvío que, a mano izquierda, conduce a la Ducha de los Alemanes, como indica una señal.
Es una pequeña pero llamativa cascada de unos 2 m, formada por el arroyo de la Navazuela en un frondoso bosque de pinos silvestres y tejos comunes. Su nombre es debido a las duchas que se daban en ella, a principios del siglo XX, los primeros montañeros de la sierra, varios de origen alemán.
Miradores
Desde allí volveremos a la pista principal, por donde continúa el itinerario. Se puede subir por unas escaleras que están a la izquierda y que van a parar al descansadero de González Bernáldez, donde hay algunos bancos de piedra para hacer un descanso. Desde el descansadero volveremos a la pista y continuaremos recto en todo momento.
1,595 km más lejos, nos encontraremos con los Miradores de los Poetas, con unas maravillosas vistas del valle y los alrededores. El primero está dedicado a Luis Rosales, que residió en Cercedilla a principios de la década de 1960 y allí pasó los últimos años de su vida. Unas escaleras de piedra a la derecha nos llevarán a otro mirador, el de Vicente Aleixandre, donde puede leerse, grabado sobre una piedra, un verso del poeta.
Más adelante, tras recorrer durante 475 metros la pista, veremos una señal que nos indica el camino hacia el Reloj de Camilo José Cela, un reloj de sol en memoria del escritor y que constituye el final de la ruta. Desde ahí regresaremos al punto de partida.
Qué ver en la zona del Valle de la Fuenfría
- Cercedilla (a 1,800 km): se pueden ver vestigios de construcciones romanas del siglo I; también destaca el Tren de la Naturaleza, un paseo en ferrocarril desde Cercedilla y hasta el Puerto de Los Cotos, que funciona en verano.
- Los Molinos (a 3,800 km): tiene bonitos edificios de piedra. Lo más destacable es la Plaza de España y los restos de los numerosos molinos que existieron en el lugar.
- Guadarrama (a 8,700 km): destacan la Plaza Mayor, donde está el ayuntamiento, y la antigua iglesia.
- Embalse de la Jaros, Peña del Arcipreste de Hita –declarada Monumento Natural de Interés Nacional en 1930– y monumento del Alto del León –un gran pedestal de granito con un león que tiene entre sus garras dos globos, símbolo de España y las Indias, que data de 1750-. Se encuentran en el entorno de Guadarrama.
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