Los ruidos nocturnos y posibles problemas de salud, lo que más preocupa a los vecinos
Ruidos constantes, emisiones contaminantes y afectaciones respiratorias son algunos de los problemas a los que se enfrentan diariamente los vecinos de la fábrica de fundición de metales Corrugados, situada en Getafe. Afecta a los barrios de Juan de la Cierva y Los Molinos, que se encuentran a unos 200 y 400 metros del lugar, respectivamente.
Corrugados Getafe es una fábrica especializada en la fabricación de barras corrugadas de acero que fundamentalmente abastece al sector de la construcción. Comenzó a funcionar en la década de los años 60 y sufrió varias ampliaciones y cambios de dirección hasta llegar a su situación actual. (iconiccandy.com) (viagra)
Una de las principales quejas de los vecinos es que la principal actividad de la fábrica tiene lugar por las noches, incluidoslos fines de semana, con el ruido que eso conlleva. «Cuando todo el mundo está descansando, ellos están aquí a tope. No nos dejan descansar«, asegura la portavoz de la plataforma Afectados Corrugados Getafe, Cristina Hormigos.
Al parecer, el problema radica fundamentalmente en que el lugar supera los niveles de ruido establecidos por ley. «El propio Ayuntamiento de Getafe dijo que estaban fuera de norma porque se producían 74 decibelios, cuando lo normal por la noche son 55«, explica.
Ante eso, el propio Consistorio ha realizado recientemente un estudio para medir los niveles de ruido de la fábrica, pero todavía están pendientes de los resultados. En caso de que se comprobaran esos datos, la empresa tendría que aplicar un plan de minimización de ruido, que ya se les ha exigido en otras ocasiones.
Contaminación y posibles problemas de salud por el problema de Corrugados Getafe
A los problemas de ruido, se suma la contaminación que irradia la fábrica, con las consiguientes posibles afectaciones respiratorias que puede provocar en los vecinos de la zona, al estar expuestos durante tanto tiempo. «Llevamos más de 5 años con el problema de Corrugados en Getafe«, admite Hormigos.
«Tenemos identificadas a varias personas que se encuentran peor cuando están viviendo en el barrio que cuando se van fuera. Hay gente que no tenía problemas de asma y ahora sí que los tiene. Y, no lo puedo demostrar, pero yo tengo muchas más probabilidades que otra persona de Getafe a sufrir cáncer porque estoy respirando cosas que no debo«, explica.
Desde la asociación quieren recalcar que no solicitan ni el cierre ni el traslado de la fábrica como solución, pero sí que cumplan con todas las medidas «con el mayor grado de exigencia posible porque está en juego nuestra salud«. Además, en ocasiones se producen también explosiones, como las relacionadas por la nieve el año pasado por la borrasca Filomena.
La empresa ya se ha pronunciado alguna vez al respecto, asegurando que cumple con la normativa. Sin embargo, Hormigos asegura que «se hacen autocontroles, y además saben cuando vienen a inspeccionarlos, por lo que manipulan los datos«.
Corrugados Getafe posee lo que se denomina una autorización ambiental integrada que le permite realizar su actividad habitual. Se le fue concedida en 2017 por la Comunidad de Madrid, que es la que se encarga de realizar inspecciones al lugar para comprobar que cumplen con la normativa. Pero solo suelen hacer una al año.
Sin solución por parte del Ayuntamiento de Getafe ni de la Comunidad de Madrid
En todos estos años, los vecinos afectados por Corrugados Getafe han estado recurriendo al Ayuntamiento de Getafe para solicitar una solución. Sin embargo, «como no llegábamos a ningún puerto, decidimos reunirnos con la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid«, cuenta la portavoz de la plataforma.
En una primera reunión, los afectados trasladaron el problema, y en una segunda, a la que asistió también el Ayuntamiento, «se dijo que el consistorio tenía competencias en el tema del ruido y que tenía que actuar«. Es lo que llevó a realizar el informe de ruido mencionado.
Según la portavoz, «hay mucho lío administrativo o normativo en el tema de las competencias«. La autorización ambiental integrada está controlada por la Comunidad de Madrid, pero la empresa está en el término municipal del Ayuntamiento, por lo que debería poder actuar sobre más cuestiones. Sin embargo, «solo puede hacer algo en tema de ruido«, explica.
Asegura que por el momento siguen exactamente igual que hace más de 5 años, cuando todo comenzó. «Es incomprensible que la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Getafe estén mirando para otro lado. No hemos tenido ningún avance«, concluye.
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