Se han detectado especies de invertebrados que habían desaparecido
Las medidas adoptadas en el entorno de La Pedriza están consolidando la recuperación medioambiental de esta zona, situada en pleno Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Así lo ha confirmado la Comunidad de Madrid, que estableció en 2016 la prohibición al baño en toda la zona del río Manzanares y la reducción de las plazas de aparcamiento en Cantocochino.
Esas dos medidas se han mantenido también este verano. Además, se han introducido algunos cambios para satisfacer las demandas de los vecinos y visitantes de la zona, como la ampliación del horario de apertura en el aparcamiento de Cantocochino. Solo un día, el 13 de junio, fue necesario cerrar la barrera antes del horario previsto por haberse completado el cupo de 270 vehículos.
Además, para facilitar el acceso a la zona, el autobús lanzadera que conecta Manzanares el Real con el aparcamiento reforzó su servicio con varios trayectos de miércoles a domingo. Esta alternativa se amplió aún más a mediados de agosto con la extensión del servicio también a los lunes y martes, funcionando así todos los días de la semana de septiembre.
Plan de recuperación ecológica
Por otro lado, a nivel medioambiental también se ha puesto en marcha el Plan de Recuperación Ecológica del entorno del Río Manzanares. Ha permitido eliminar distintos elementos artificiales del cauce del río, realizar plantaciones para recuperar la vegetación de ribera y acondicionar dos senderos alrededor de la Charca Verde.
Todos estos esfuerzos se están reflejando en la recuperación medioambiental de este privilegiado entorno natural. Aunque los investigadores señalan que la vuelta de la zona a su estado óptimo de conservación requerirá tiempo, los estudios de varios tramos del Manzanares revelan una mejora del 20% respecto a 2015 en la calidad biológica y ecológica del río aguas abajo de la Charca Verde. En el entorno de El Tranco se eleva hasta casi el 30 % en el entorno de El Tranco.
La fauna también se está viendo beneficiada con esta menor presión y contaminación que provocaba la asistencia masiva de visitantes. Se han detectado especies típicas de invertebrados bentónicos que habían desaparecido antes de 2015.
Los madrileños y foráneos que se acercan a La Pedriza durante los meses estivales cada vez están más concienciados sobre la importancia de cuidar entre todos esta joya natural. Según las encuestas realizadas durante este pasado verano a los usuarios de la zona, el 75 % ve bien o muy bien la prohibición del baño.
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