Está en el barrio de Las Rosas (San Blas) y podría tratarse de huesos de una tortuga del mioceno-pleistoceno
La construcción de un polémico supermercado Mercadona en una parcela residencial del barrio de Las Rosas (San Blas-Canillejas) sigue dando que hablar. A pesar de las protestas vecinales, el Ayuntamiento dio vía verde a la creación del centro comercial en un espacio entre chalés, pero al comenzar las obras se han encontrado con una sorpresa. «Parece que hay restos arqueológicos«, confirmó hace unos días Marta Gómez, concejal del distrito en el último pleno municipal del distrito.
Lo anunció tras ser preguntada «por el grupo socialista en relación a las licencias con las que cuenta Mercadona para realizar esas obras en la parcela», explica Carmen, representante de la Plataforma contra Mercadona. «La empresa sigue sin pedir esos papeles», continúa, «y tampoco parece que estén autorizados para realizar los trabajos arqueológicos que están haciendo».
Una tortuga del pleistoceno
Gómez respondió que la poda de árboles «se había hecho con licencia» y a continuación comentó que las obras podrían retrasarse por los restos arqueológicos hallados. El Ayuntamiento no ha confirmado más información al respecto, sin embargo, La Página del Distrito adelanta algo más: se trataría del caparazón, los huesos y el esqueleto de una tortuga que pueden datar del mioceno-pleistoceno.
Según la revista del distrito de San Blas-Canillejas, en esta zona se han hallado más restos fósiles de ese estilo. Por ejemplo, se encontraron algunos en las obras del polideportivo Fabián Roncero (Ciudad Pegaso) y en el aparcamiento del Centro Comercial Makro (Rejas). Todos ellos estarían bajo la custodia y evaluación de la Comunidad de Madrid.
Meses de polémica en torno a la construcción del supermercado
La polémica en torno a la construcción del Mercadona en esta zona surgió en el mes de mayo del pasado año. Las protestas vecinales por tratarse de una zona residencial, muy tranquila, que se vería afectada por el paso de camiones y trasiego de coches, llevaron a la alcaldesa Manuela Carmena a sentarse con los vecinos para hablar de la situación. Sin embargo, la decisión del Ayuntamiento fue seguir adelante.
Pasados los meses no parecían comenzar las obras, hasta que «hace quince días empezaron a excavar, colocaron cuatro casetas y han estado entrando vehículos pesados sin ni siquiera poner un vado«, relata Carmen. Los vecinos han observado cómo se han realizado cuatro zanjas, y una de ellas se está «ampliando y escalonando, y cinco personas todas las mañana trabajan con pinceles «. Según la vecina, «son trabajos de arqueología«.
Sin fecha de obras
«Estamos en shock«, confiesa, «nos parece surrealista». Cuenta que «Mercadona se ha puesto en contacto con una vecina al ver que se comentaban cosas en nuestro Facebook y le ha dicho que son trabajos habituales». Algo inconcebible para los vecinos, que además aseguran que la parcela sigue sin ser propiedad de la empresa.
Los vecinos se quejan además de que «Mercadona nos aseguró que nos tendría informados de todo lo que fuera pasando», de cuándo iban a comenzar a construir y cuándo estaría finalizado el edificio. Sin embargo, «no lo han hecho». Ahora ni siquiera saben si el supermercado terminará instalándose o no en la parcela, «ellos solo dicen que se va a construir pero aún no saben ni cuándo». Ahora habrá que esperar para conocer la relevancia de los restos encontrados.
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