El Gobierno asegura por otros 15 años la exposición de la Colección Carmen Thyssen en el museo
Recientemente, la organización de la colección del Museo Nacional Thyssen-Bornemisza ha sufrido su primer gran cambio desde su inauguración en el año 1992. La planta baja ahora alberga la colección privada de Carmen Thyssen.
La pintura moderna, que abarca los siglos XIX y XX, está reunida en la primera planta, mientras que los maestros procedentes de los siglos XIII al XVIII han sido reubicados en la segunda planta.
La nueva organización de los cuadros en el Museo Thyssen-Bornemisza ha afectado con mayor prominencia a la pintura antigua; en concreto, a los cuadros de la escuela holandesa de los siglos XVII y XVIII. Estos no solo han subido de planta en el Palacio de Villahermosa, sino que han sido reunidos en tres salas dedicadas al paisaje.
La nueva organización de la pintura moderna es cronológica
La pintura del siglo XVIII se ha destinado a la sala 22, con ejemplos de artistas italianos. La sala 25 reúne la pintura francesa y británica, la 26 recoge piezas de paisaje urbano e italianizante, la 27 retratos y la 28 pintura de marinas y Ruisdael. Por último, la exposición de la segunda planta termina con el romanticismo y Goya, en la sala 29.
En relación a la pintura moderna, la nueva organización del Museo Thyssen-Bornemisza responde a una secuencia cronológica, combinada con unas cuantas agrupaciones temáticas.
Así pues, ocupando la primera planta, el recorrido cronológico empieza con el impresionismo francés, para después dar paso al expresionismo centroeuropeo, las primeras vanguardias históricas y el desarrollo de la abstracción. La visita continúa con el dadaísmo, el surrealismo y el arte europeo de los años centrales del siglo XX.
La Colección Carmen Thyssen pasa a la planta baja del museo
Las agrupaciones temáticas pueden encontrarse en las salas 37, 38 y 39, donde el enfoque es la transformación del retrato y la representación del ser humano durante el siglo XX. Asimismo, actualmente está en exhibición una instalación provisional de arte americano de los siglos XIX y XX. Su vigencia perdurará hasta la inauguración de la exposición Arte Americano en la colección Thyssen, el 13 de diciembre de 2021.
La colección privada de Carmen Thyssen, que hasta la reordenación estaba repartida entre la primera y segunda planta, ocupa ahora el ‘corazón’ del Museo Nacional; esto es, las ocho salas que conforman la planta baja.
Esta colección no es propiedad del Estado español, a diferencia de la que había pertenecido al difunto barón Hans von Thyssen-Bornemisza, que fue adquirida en 1993 por un valor de 350 millones de dólares.

La planta baja permanece cerrada
La exposición de las pinturas de la Colección Carmen Thyssen se realiza mediante un contrato de alquiler entre la propietaria —Carmen Thyssen— y el Ministerio de Cultura. El contrato que vinculaba a ambas partes caducó en el año 2011. Desde entonces, se han sucedido una serie de prórrogas ante la incapacidad de alcanzar un acuerdo para la firma de un nuevo contrato.
A principios del presente año, el Gobierno anunció un principio de acuerdo con Carmen Thyssen. El nuevo contrato aseguraría la permanencia en el museo de las 329 obras de la colección durante otros 15 años.
El valor estimado del acuerdo sería de 97,5 millones de euros. En cualquier caso, hasta que el acuerdo se firme, Carmen Thyssen ha retirado sus pinturas del museo. Por esta razón es que, a día de hoy, la planta baja está cerrada.
La nueva organización del Thyssen-Bornemisza saca de la planta baja a artistas como Pablo Picasso o Juan Gris
Previamente a la reorganización, la planta baja estaba ocupada por el arte europeo de la primera mitad del siglo XX, los pioneros de la abstracción, los surrealistas, la pintura norteamericana del siglo XX, la figuración de posguerra, el pop art y el hiperrealismo.
Con la reordenación, de este privilegiado lugar desaparecen artistas de la talla de Pablo Picasso, George Braque, Juan Gris, Dalí, Balthus, entre otros. El Museo Nacional, hoy por hoy, recibirá al visitante con una colección de la que no es propietario.
El Museo Thyssen-Bornemisza, con sus casi mil obras en exposición, es uno de los museos más importantes de Madrid, junto con el Reina Sofía y el Museo del Prado. Los tres se localizan en la zona del Paseo del Prado, conformando lo que se conoce como el ‘Triángulo del Arte’. La entrada para el público general tiene un precio de 13 €, pero los poseedores con el Abono Transporte Joven 18-27 años o el Carné Joven entran gratis.