El Mirador Huerta de la Partida se encuentra entre el Puente del Rey y la avenida de Portugal, en la orilla derecha del río Manzanares
Si visitas Madrid, hay un lugar que no puede faltar en tu recorrido, el Mirador Huerta de la Partida, que ofrece una de las vistas panorámicas más bonitas de la ciudad. Además, es un espacio que atesora una rica historia y una belleza natural verde e incomparable.
Está ubicado entre el Puente del Rey y la avenida de Portugal, en la orilla derecha del río Manzanares, y desde allí se puede observar la cornisa oeste de la villa de Madrid, coronada por el Palacio Real, la Catedral de la Almudena y la plaza de España, entre otros edificios emblemáticos.
Es tan hermosa la vista que el pintor flamenco Anton Van Wingaerde decidió inmortalizarla a finales del siglo XVI, siendo la primera vez que se pintaba este lugar. A día de hoy, la obra, que se conserva en la Biblioteca Albertina de Viena, sigue cautivando.
Más de 800 árboles
El Mirador Huerta de la Partida fue reformado hace unos años cuando se soterró la M-30 y se creó el parque Madrid Río. Así, se convirtió en un refugio verde con más de 800 árboles que despliegan su esplendor, especialmente en primavera, cuando el entorno se tiñe con los colores de estos ejemplares frutales.
La huerta alberga almendros, avellanos, ciruelos, granados, higueras, manzanos, moreras, nogales, olivos y perales. También es hogar de una gran variedad de aves, de pequeños mamíferos y de insectos polinizadores que son fundamentales para mantener su vitalidad y belleza.
Hay que destacar, además, su importancia como lugar de cultivo de plantas medicinales y terapéuticas. Ya en el siglo XVI, la Huerta de la Partida estuvo dedicada al cultivo de plantas medicinales por decisión de Felipe II, quien encargó a Gregorio de los Ríos, jardinero real, las primeras plantaciones de especies medicinales para abastecer la farmacia de la corte.
En 1929, dos hectáreas y media de la huerta fueron cedidas por Alfonso XIII al Comité de Plantas Medicinales siendo utilizado como un campo de experimentación.
El Mirador Huerta de la Partida, propiedad de la Familia de los Vargas
El espacio cuenta la historia de la finca de la Familia de los Vargas. Fue propietaria de esta finca con huertas y una casa de campo, el Palacete de los Vargas, desde los últimos años de la Edad Media hasta 1562.
En ese momento, la adquirió Felipe II, que la convirtió en el núcleo principal de la Casa de Campo. Allí, cultivaban las hortalizas para abastecer tanto al palacete de la finca como al Palacio de los Vargas, en la plaza de la Paja.
La historia también está entrelazada con el pasado natural de la ciudad, ya que integra un cauce seco artificial, evocador de tiempos pasados cuando el arroyo Meaques fluía por allí en busca del río Manzanares en su camino hacia el Jarama.
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