Hay también un teléfono de duelo y servicios para honrar a seres queridos fallecidos por coronavirus
El teléfono 900 102 112, que se ha destinado a informar sobre dudas del COVID-19, ha añadido esta semana una nueva funcionalidad: encontrar a familiares fallecidos por el coronavirus. Se ha habilitado para quienes que puedan tener dudas sobre la localización de su ser querido.
Una vez identificado el solicitante, la búsqueda de un fallecido se puede hacer facilitando su nombre y número de documento de identidad, o también por el centro en el que estaba ingresado. Los datos sobre los fallecidos por coronavirus y su ubicación se actualizan a lo largo del día.
Los operadores del 900 102 112 informan también a los ciudadanos sobre los trámites a seguir con las empresas funerarias.
Además, el teléfono 900 102 112 sigue proporcionando, como hasta ahora, información sobre cualquier duda relacionada con el coronavirus, desde posibles síntomas a medidas para mantener aislamiento a domicilio. Si se considera necesario, desde allí se pone en contacto al ciudadano con el SUMMA-112.
Servicio telefónico de duelo para familiares de fallecidos
Por otro lado, el Ayuntamiento ha puesto en marcha un servicio telefónico de duelo para los familiares de fallecidos como consecuencia de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Está destinado a familiares de usuarios que estaban dados de alta en alguno de los servicios municipales ofrecidos a mayores.
La iniciativa consiste en una llamada inicial por parte de los servicios municipales para mayores. En ella, un psicólogo realiza una primera valoración de la situación en que se encuentran los familiares del fallecido. A partir de ahí, se establecen unas estrategias para que los afectados compartan su dolor.
Les recomiendan que se conecten a través de la tecnología con sus familiares y amistades para recordar a la persona fallecida. Es una manera de aliviar el duelo en circunstancias de aislamiento y soledad. Pasados unos días desde la primera llamada, se realizan posteriores valoraciones para reforzar las estrategias con el fin de mitigar el dolor.
Velatorios prohibidos
Desde el pasado 30 de marzo, los velatorios están prohibidos, independientemente de la causa del fallecimiento y de si se celebran en instalaciones públicas o privadas, incluido los domicilios particulares. El objetivo es limitar la propagación y el contagio por el coronavirus.
Además, según la orden ministerial publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE), en el caso de fallecidos por COVID-19 no se pueden realizar prácticas de tanatoestética, intervenciones de tanatopraxia, ni intervenciones por motivos religiosos que impliquen procedimientos invasivos en el cadáver.
La norma recoge otras medidas excepcionales como la restricción de las ceremonias fúnebres. En este sentido, se pospone la celebración de cultos religiosos o ceremonias civiles fúnebres hasta que finalice el estado de alarma.
No obstante, en el enterramiento o despedida para la cremación de la persona fallecida, se permitirá la asistencia de tres familiares o allegados. También, en su caso, puede estar la persona asimilada de la confesión respectiva para la práctica de los ritos funerarios de despedida del difunto. Estas personas deben respetar siempre la distancia de uno a dos metros entre ellas.
Empresas funerarias
Algunas empresas funerarias han puesto a disposición de los familiares espacios virtuales donde compartir recuerdos y rendir homenaje a su ser querido fallecido. Es el caso de Parcesa, que regalará a cada familia un servicio donde poder publicar mensajes, recuerdos, tarjetas de pésame o encender velas virtuales.
Para ello, enviará un enlace privado que la propia familia compartirá a través de WhatsApp con quien decida. Desde ese enlace – que se abrirá sin registro previo y sin bajarse ninguna app-, se accederá al área personal, donde se podrán compartir esos recuerdos.
El servicio estará a disposición de quienes pierdan a un ser querido, independientemente de la causa del fallecimiento, y que no tengan a su alcance la opción de realizarlo a través de su seguro de decesos. El objetivo es mitigar el dolor que en estos días sufren algunas familias al no poder despedir a su ser querido en un velatorio o con una ceremonia.
Por su parte, Interfunerarias se suma a esta situación organizando actos de recuerdo, una vez se levanten las medidas de contención del estado de alarma. Están destinados a familias asistidas durante el confinamiento y que no han tenido oportunidad de velar a sus seres queridos. Así, cederá sus instalaciones y se encargará de la organización de las ceremonias, sean civiles o religiosas, sin coste alguno.
En relación a las empresas funerarias, la asociación de consumidores FACUA aconseja reclamar si alguna ha cobrado precios superiores a los que tenían antes del 14 de marzo. La prohibición de que los servicios funerarios cobren precios superiores a los que tenían antes de esa fecha se encuentra publicada en la Orden SND/298/2020.
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