El equipo blanco se impone en Málaga al Barcelona en la final y consigue su 29º título copero
El Real Madrid ganó ayer, 18 de febrero, la final de la Copa del Rey de baloncesto en el Martín Carpena de Málaga, en una final muy disputada, en la que logró imponerse al Barcelona por 96-85. Con este título, el Madrid consigue su 29º título copero, alejándose en dos del Barcelona, con 27.
Si hay algo que ilusiona aparte del éxito, es el reconocimiento por conseguirlo. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha recibido hoy lunes en la Real Casa de Correos al equipo, directiva y cuerpo técnico del Real Madrid tras su triunfo en la final de la Copa del Rey de baloncesto.
La Copa del Rey de baloncesto se debate en un partido sin freno
La final de la Copa del Rey transcurrió con máxima igualdad durante los tres primeros cuartos, pero el último marcó la diferencia, con una ventaja de nueve puntos lograda por los blancos a cinco minutos del final que acabó siendo definitiva.
Como en una partida de ajedrez, el Barcelona decidió plantear el partido a un intercambio de golpes. El Madrid aceptó este partido de correcalles, de idas y venidas, el que va al esprint y no encuentra la pausa.
La batalla por la supremacía del baloncesto nacional mantuvo el partido en un puño, lo que provocó que, debido a la tensión, la electricidad y la enemistad de los equipos, Rudy Fernández, jugador del Real Madrid, y Satoransky, jugador del Barcelona, se encarasen antes del descanso camino del vestuario.
La anotación estuvo muy repartida en el equipo blanco, en el que hasta seis jugadores estuvieron por encima de los diez puntos. Otra de las claves fue el rebote, donde el Real Madrid dobló en rebote ofensivo al Barcelona.