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El Atlético de Madrid se impuso 2-0 en Turquía sin problemas.
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El Real Madrid goleó con polémica y lesiones al Shakhtar en el Bernabéu.
Ayer volvió la Champions y en su primera jornada de la fase de grupos apenas han ocurrido sorpresas, excepto la derrota del Manchester United en Eindhoven, con la que no contaban muchos. Unos de los pronósticos que sí se cumplieron influyen en el Atlético de Madrid y el Real Madrid, que apenas sufrieron para comenzar con victoria la competición.
Los rojiblancos venían de caer ante el Barcelona en la liga sin ofrecer su mejor versión, y visitaban el martes el estadio más complicado de su grupo. Pero como el público no juega, pudieron hacer valer su superioridad ante un Galatasaray que apenas inquietó en ataque.
El primer gol llegó en una buena combinación entre Vietto y Juanfran en la banda izquierda para que centrara el lateral al balcón del área y Griezmann fusilara a Muslera. Se acordarían entonces los aficionados turcos de la noche del 31 de agosto, cuando Alex Telles y Felipe Melo fueron traspasados al Inter y quedaron cojas las posiciones que no frenaron esta acción.
El partido se acabó con el segundo tanto del francés, después de que Godín le cediera de cabeza un centro de Koke desde la banda derecha para que la hinchada local volviera a echar de menos a los brasileños. Intentó reaccionar en la reanudación el Galatasaray, pero no logró inquietar a Obak ni a la defensa en ningún momento salvo alguna genialidad aislada de Snejder.
Goleada del Madrid y rosario de lesiones
Por su parte, el Real Madrid goleó al Shakhtar Donetsk en un partido que no fue duro ni violento pero que se saldó con tres lesionados y un expulsado. La primera media hora tenía un guión claro: los españoles rondaban el área contraria en ataque posicional para abrir huecos y los ucranianos esperaban atrás para contragolpear con sus rápidos y hábiles brasileños de tres cuartos, aunque no lograron inquietar a Keylor Navas en ningún momento.
El partido cambió después de eso, cuando Bale empezó la plaga de lesiones. En su lugar entró el todavía desconocido para la afición española Kovacic. Su presencia aumentó el número de efectivos en el medio y anuló al ya escaso ataque del Shakhtar. Justo después llegó el centro de Isco y el gol de Benzema en un error entre Pyatov y Rakitskiy: el central no despejó pensando que el portero atraparía el balón, y este creyó que su compañero despejaría y no puso tensión a las manos para agarrarlo. 1-0.
En la reanudación entró Pepe por Varane, el segundo lesionado, y el partido se terminó de romper. Stepanenko fue expulsado por una dura entrada sobre Ramos, el tercer lesionado, y Ronaldo hizo tres goles. Dos de ellos fueron de penaltis que no eran: uno de Srna que el árbitro da como mano cuando le golpea en la espalda, y el otro de Azevedo, también por mano, después de un rebote con la mano de Carvajal. El último llegó pescando un rebote del portero.
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