El ‘cohousing’ y el ‘coliving’ llegan a Madrid

Se aprueba la regulación de ambos modelos residenciales, que entra en vigor en los próximos meses

El Pleno del Ayuntamiento de la capital ha aprobado provisionalmente la modificación de las normas urbanísticas, que incluye la regulación del cohousing y el coliving en Madrid. Se trata de dos nuevos modelos residenciales emergentes, muy populares entre los jóvenes, que consisten en compartir espacios en los edificios para ahorrar en gastos y generar una sensación de convivencia con los vecinos.

En concreto, el coliving implica alquilar una habitación con baño propio y compartir el resto de espacios del inmueble con los vecinos. Es un sistema similar al de las residencias de estudiantes, pero dirigido al público general. Con la nueva normativa, se introduce la obligación de que las viviendas privadas no sean inferiores a 15 metros cuadrados si son para una persona, ni menores de 10 metros cuadrados si son para más de una.

Mientras, el cohousing es un sistema algo más colaborativo en el que los convivientes diseñan su propia casa a su medida. Generalmente, son edificios en los que cada persona o grupo de personas tiene una vivienda particular y se crean espacios comunes como una cocina, un lugar de juegos, etc, para compartir con el resto de vecinos. Con la nueva regulación, la superficie mínima de la vivienda tiene que ser de 30 metros cuadrados, compensando el resto hasta los 40 metros cuadrados con las zonas comunitarias.

Otras medidas que introducen las nuevas normas urbanísticas, además de la regulación del coliving y el cohousing, en Madrid

La modificación de las normas urbanísticas no solo introduce la regulación del coliving y el cohousing en Madrid, sino que también presenta nuevas medidas:

• Las nuevas viviendas de la capital no podrán ser inferiores a 40 metros cuadrados.
• Las terrazas, los cuartos de instalaciones en plantas de piso y los trasteros no computarán a efectos de edificabilidad.
• Ya no será necesaria la separación física entre cocina y tendedero.
• Posibilidad de transformación de local a vivienda.
• Se permitirán los miradores con persiana.
• Los cuartos de instalaciones se liberarán de las azoteas de los edificios para que sean transitables y utilizables.
• Introducción del factor verde:
  • Aumento de la superficie vegetal total en la edificación a través de cubiertas y fachadas verdes. En el espacio libre de parcela, fomento de la plantación de arbolado y el ajardinamiento.
  • Los elementos de producción de energía sostenible o elementos constructivos de mejora de la eficiencia, así como los cuartos para guardar vehículos de movilidad sostenible como las bicicletas no computarán a efectos de edificabilidad. 

• Se posibilita la construcción de viviendas tuteladas y de integración social en suelos dotacionales.
• Las Viviendas de Uso Turístico se mantienen con la misma regulación, incluida la exigencia de establecer un acceso independiente a la vivienda.
• Se actualizan los aforos de los locales y se elimina la obligación de dotar de aparcamiento en aquellas zonas donde no se permite llegar coches.
• Cocinas agrupadas:
  • Se prioriza su implantación en polígonos industriales y se limita su actividad en zonas residenciales, solo permitidas en locales con un máximo de 350 metros cuadrados. En el interior deben tener zonas de espera, carga y descarga y estancia de los transportistas.
  • El máximo de cocinas permitidas será de ocho.
  • Se exigirá un estudio de movilidad para conocer el impacto que tendrá en la zona.

El objetivo de las nuevas normas urbanísticas es adaptarse mejor a las nuevas tendencias que demandan los ciudadanos. De esta forma, se mejoran las condiciones de confort, accesibilidad, habitabilidad y salubridad en las viviendas de Madrid. El texto se ha remitido a la Comunidad de Madrid para que obtenga la luz verde definitiva del Consejo de Gobierno en un plazo máximo de cuatro meses. Entonces, entraría oficialmente en vigor.