Se quiere reconocer la trayectoria de la deportista Blanca Fernández Ochoa, tras su muerte
En honor a su extensa trayectoria deportiva, el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha acordado la concesión a título póstumo de la Medalla de la Comunidad de Madrid, en su categoría Oro, a Blanca Fernández Ochoa. Sus logros para el deporte español son muchos, aunque siempre será recordada por ser la primera mujer en conseguir una medalla olímpica en unos Juegos de Invierno para España.
El portavoz del Gobierno regional, Ignacio Aguado, explicó a los medios de comunicación la motivación del Ejecutivo madrileño para la condecoración: «queremos reconocer la trayectoria de la esquiadora madrileña y su aportación al deporte español». Además, destacó su importancia para romper barreras, techos y muros en el deporte femenino.
Participó en cuatro olimpiadas de invierno
La esquiadora, nacida en el distrito madrileño de Carabanchel, consiguió el bronce en el eslalon en los Juegos Olímpicos de Albertville (1992). También había obtenido el primer puesto en el de Vail en 1985, siendo la primera victoria de una esquiadora española en la Copa del Mundo. En el de Calgary (1988) quedó en el quinto lugar, y cuarta en el mundial de Vail (1989).
Durante su dilatada carrera, participó en cuatro ocasiones en los Juegos Olímpicos de Invierno: en Lake Placid, Estados Unidos, 1980; Sarajevo, antigua Yugoslavia, 1984; Calgary, Canadá, 1988; y Albertville, Francia, 1992. Asimismo, ganó cuatro copas del mundo, en las disciplinas de eslalon y eslalon gigante.
Reconocimiento por sus servicios a la Comunidad
La Medalla de la Comunidad de Madrid, que cuenta con la categoría de Oro y Plata, se otorga a instituciones, personas físicas o jurídicas. Es un reconocimiento por su servicio a la Comunidad desde cualquier ámbito.
Entre otros galardones, en 1988 fue distinguida también por la Comunidad de Madrid con uno de los Premios Siete Estrellas del Deporte. Igualmente se la condecoró con el Premio Reina Sofía a la mejor deportista española en 1983 y 1988, otorgado por el Consejo Superior del Deporte, y la Medalla de Oro de la Real Orden del Mérito Deportivo.
Blanca Fernández Ochoa
La exesquiadora, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en la Sierra de Guadarrama en un pico de La Peñota el 4 de septiembre, había ido a pasar unos días a la montaña, según dijo a su hija Olivia el pasado 24 de agosto. Cinco días más tarde, al ver que su madre no regresaba, la chica puso una denuncia y la Policía comenzó una exhaustiva búsqueda por la sierra.
El día 30 se encontró su coche aparcado en Las Dehesas de Cercedilla, localidad madrileña donde residía, y los agentes dedujeron que estaría ahí aparcado desde el 25 de agosto. Tras varios días buscando a Blanca, un guardia civil fuera de servicio que ayudaba como voluntario con su perro en el dispositivo de búsqueda, localizó el cuerpo sin vida de la deportista.
La Policía descartó una muerte accidental, pues el cuerpo se encontraba en ‘posición natural’ y Blanca había ingerido pastillas que formaban parte de la medicación que tomaba para su trastorno bipolar. Aún se desconocen las causas de la muerte, que pudieron ser un infarto o una ingesta excesiva de medicamentos.
El fallecimiento de una deportista tan querida por todos ha levantado cierta polémica sobre la situación en la que quedan algunas grandes figuras del deporte, medallistas olímpicos y vencedores en grandes torneos internacionales, cuando se retiran de la vida activa. Los homenajes y reconocimientos están llegando ahora que ya no está. Sus cenizas serán enterradas en los Siete Picos de la Sierra de Guadarrama.
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