Gracias a la nueva iniciativa del Ayuntamiento ‘Adopta un árbol’, ahora los bebés recién nacidos pueden vincularse a un ejemplar de las calles de la capital
El Ayuntamiento de Madrid ha lanzado una nueva iniciativa para que los bebés recién nacidos en la capital puedan vincularse con un árbol presente en una de sus calles. Así, a través de ‘Adopta un árbol’, los padres de los pequeños nuevos habitantes de la ciudad eligirán un ejemplar y lo adoptarán en nombre de su retoño.
Son 5,7 millones de árboles los que se encuentran repartidos en 5.200 calles y 3.800 zonas verdes y parques de la ciudad. No todos ellos están disponibles en ‘Adopta un árbol’: las familias solo podrán apadrinar uno de los 1,7 millones de ejemplares cuyo mantenimiento depende del Consistorio.
En total, se espera que 10.000 nuevos madrileños se vinculen a un árbol cada año. De momento, solo se puede hacer con los menores empadronados en Madrid de menos de un año. El proceso para llevar a cabo esta adopción se realiza a traves de la web Madrid 360, en la sección Adopta.
En ella, los progenitores pueden seleccionar, en un mapa y mediante identificación digital, el árbol que quieren adoptar en nombre de sus hijos. El plano tiene como punto central la Puerta del Sol, pero el usuario puede navegar libremente y ver todos los árboles a los que puede optar, representados con un icono. Si pulsa sobre ellos, aparece una ventana emergente con los datos más relevantes del ejemplar.
Una vez realizada la adopción a través de ‘Adopta un árbol’, la familia recibe un certificado firmado por el alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida. En él, figura el nombre del menor y su fecha de nacimiento, la especie del árbol adoptado, el barrio y el distrito al que pertenece, así como las coordenadas con su ubicación exacta.
La adopción no otorga ningún derecho a las familias sobre el ejemplar
Se recuerda que cada uno de los árboles adoptados forman parte del patrimonio natural de Madrid y que el proceso no otorga a los padrinos ningún derecho sobre estos ejemplares más allá del vínculo familiar y entrañable que se genere con él y, por extensión, con todo el arbolado de la ciudad.
Madrid es actualmente una de las ciudades más verdes del mundo con más de la mitad de las calles arboladas (un 54%). Solo en el anterior mandato (2019-2023) se plantaron 210.500 ejemplares. La ONU, de hecho, ha reconocido por cuarto año consecutivo a la capital como Ciudad Arbórea del mundo y el Consistorio ya está ultimando la documentación para conseguir este certificado por quinta vez.
En este sentido, el Ayuntamiento de Madrid ha incrementado en más de un 48,3% el presupuesto destinado a la limpieza viaria y la recogida de residuos, y a la conservación de zonas verdes con un total de 915 millones de euros.
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